EMDR: Descubre qué es y cómo funciona esta terapia revolucionaria

La terapia EMDR (Desensibilización y Reprocesamiento por Movimientos Oculares) es una forma revolucionaria de tratamiento que ha demostrado ser efectiva en el abordaje de trastornos de estrés postraumático, ansiedad, fobias y otros problemas emocionales. En este artículo, exploraremos en qué consiste el EMDR y cómo funciona, así como los beneficios que puede ofrecer.

¿Qué es el EMDR?

El EMDR es una terapia desarrollada en la década de 1980 por la psicóloga francouzbegrínglesa Francine Shapiro. Es un enfoque terapéutico que combina elementos de la psicoterapia cognitivo-conductual con la estimulación bilateral del cerebro, a través de movimientos oculares, toques táctiles o estímulos auditivos. Este proceso ayuda a desbloquear y reprocesar la información almacenada de manera disfuncional en el cerebro, permitiendo que las personas superen experiencias traumáticas y mejoren su bienestar emocional y mental.

¿Cómo funciona el EMDR?

El proceso del EMDR puede dividirse en varias fases principales: historia clínica, preparación, evaluación, desensibilización, instalación y escaneo corporal, y cierre. Durante la fase de historia clínica, el terapeuta recopila información sobre la historia personal del paciente, incluyendo experiencias traumáticas y áreas problemáticas a abordar.

En la fase de preparación, el terapeuta ayuda al paciente a desarrollar habilidades de afrontamiento y recursos internos para manejar emociones intensas durante el proceso de desensibilización y reprocesamiento. Esta etapa es crucial para garantizar la seguridad y la estabilidad del paciente durante el tratamiento.

Luego, en la fase de evaluación, el terapeuta trabaja con el paciente para identificar eventos específicos que causan angustia o síntomas negativos. El terapeuta guía al paciente a través de la rememoración de estos eventos traumáticos mientras se concentra en los movimientos oculares o los estímulos bilaterales.

En la fase de desensibilización, el terapeuta utiliza la estimulación bilateral para facilitar la reducción de la intensidad emocional asociada con los eventos traumáticos. Este proceso ayuda a desbloquear los recuerdos y a cambiar la forma en que se almacena la información en el cerebro.

Después de la desensibilización, comienza la fase de instalación, donde el terapeuta ayuda al paciente a reemplazar las creencias negativas asociadas con las experiencias traumáticas por creencias positivas y fortalecedoras. Esta etapa proporciona una base sólida para el crecimiento personal y el desarrollo de una perspectiva más equilibrada y saludable.

En la fase de escaneo corporal, el terapeuta invita al paciente a explorar las sensaciones físicas que acompañan a las experiencias traumáticas mientras se le proporciona la estimulación bilateral. Esto ayuda a liberar cualquier tensión residual en el cuerpo y a integrar plenamente el proceso de desensibilización y reprocesamiento.

Finalmente, la fase de cierre se centra en la evaluación del progreso y en el fortalecimiento de los recursos internos y las habilidades de afrontamiento aprendidas durante el tratamiento.